Amor

Amor es una luz que se enciende con la chispa para hacerse fuego. No pienses que es una luz anodina de fluorescente o una luz de bombilla cualquiera, ni tan siquiera de linterna o de cerilla. Es una luz que juega a ser amarilla, a veces roja o ennegrece adormecida para surgir después brasa y dar calor. Amor es como una hoguera que necesita aire para existir; el aire de un suspiro, el soplo de un beso, la brisa de las pestañas de unos ojos que miran con dulzura... Pensareis tal vez que Amor es cursi y lánguida, pero Amor puede ser volcán y también confortable rescoldo. Amor es miedosa y teme al viento de la indiferencia que puede apagarla para siempre. Teme a las tormentas con granizo de palabras porque la hielan, o a la lluvia hecha de cualquer tipo de maltrato. Amor se transforma con los rayos de los celos y entonces se enciende y en lugar de calentar, quema y arrasa dejando todo lleno de la ceniza del odio. Amor necesita crepitar para sentirse viva. Le gusta notar la leña hecha de haces de caricias que la convierten en fuego ardiente, o las ramas de abrazos, o las piñas de detalles que la hacen convertirse en pavesas y ser humo y nube. Le gusta la gente, los árboles, el cielo azul de la mañana, la luna plateada flotando sobre el lago al anochecer. ¡Le gustan tantas cosas! Le encanta la risa que la hace ascuas. Con toda seguridad algún día te encontrarás a Amor. Es posible que esté triste y apagada en algún rincón, entonces recuerda todo lo que le gusta y procura por todos los medios que no se apague.